domingo, 17 de enero de 2010
Cubito ♥
¡Qué maravilloso, qué interestelar!, ¿Yo de verdad merezco esto?. No es una mas de mis historias, una mas de mis subidas o caídas, esto es... ¡grandioso!. Es la historia de él, el espacio, el universo, lo hermoso, de mi, y de la conexión que nos une y que nos unió aquel día, cualquiera envidiaría lo que sentimos, la adoración máxima por nuestras palabras al hablarnos, al hacer sonidos que solo nosotros entendíamos o cosas que la importancia dejó de lado pero que para ambos eran el relevante paso a risas que nos hacían infinitamente alegres, me enseñó a escuchar de una forma distinta, me enseñó a vivir el momento de cada pensamiento loco que me invadía, me enseñó a ser yo, yo y el, que tenemos la peor suerte del mundo y que la vida es para los dos cuando estamos conectados extrañamente. Jamás me había sentido así y es que es tan imposible, el tiene su amor, quizás yo tengo el mio (a medias) y el en su ciudad yo en la mía, nos esperamos eternamente como el hermoso beso robado en la cocina.